Resultados / Conclusión
Se parte de un modelo de microgestión de la calidad, donde los servicios definen objetivos y acciones a realizar en sus ámbitos, con una visión aislada y estrictamente clínica. La evolución de la institución fue a la par de la del modelo, donde el servicio de calidad comenzó a trabajar el alineamiento de objetivos y acciones para la integración total del sistema. Desde Calidad se define el marco estratégico sobre el que desplegar con los servicios los objetivos específicos de cada ámbito, siendo su función garantizar la coherencia con las líneas de trabajo marcadas por dirección. La nueva Política fija 2 objetivos generales aplicables a toda la institución: la mejora de la calidad del servicio sanitario y la mejora de la calidad en la gestión y se concretan en principios: Satisfacer las necesidades y expectativas de los grupos de interés, Velar por la adecuación de las capacidades profesionales de los trabajadores, Extender la cultura de calidad y satisfacción a la operativa de los profesionales, Cumplir con la normativa legal, acuerdos, convenios y políticas institucionales, Trabajar en base a la evidencia científica, conocimiento adquirido y consensuado y a las buenas prácticas identificadas, Evaluar los procesos, detectando puntos críticos y áreas de mejora.
Disponer del marco de una política de calidad global dota al sistema de la robustez necesaria para incorporarlo en los procesos de nuestros grupos de interés. El respaldo de la política de calidad por el equipo directivo, se evidencia en sus decisiones y se reconoce en la manera de definir y trabajar los procesos. Para que la cultura de calidad esté presente en la operativa de los profesionales, hace falta que ésta forme parte de la estrategia corporativa